Reportajes
Abogados penalistas, ¿qué hay que saber?
El Derecho cuenta con un gran número de ramas las cuales, son especialidades para poder llevar a cabo casos de diversa índole.
En este sentido, los abogados penalistas son de gran importancia, teniendo en cuenta que toda la actividad que realizan se rige por la Ley de Enjuiciamiento Criminal y el Código Penal, dos normas esenciales para la sociedad.
Es evidente que el derecho es una de las disciplinas más importantes, sabiendo que es bastante amplia y que engloba un gran número de áreas y ramas a través de las cuales, los abogados pueden especializarse en las mismas. En este caso, una de las materias esenciales para la sociedad, sin duda, es el derecho penal, entendiéndose como la rama por la que se regula todo lo relacionado con la actividad criminal dentro de un país, es decir, aquello que tiene que ver con los delitos, penas o medidas de seguridad que hay que aplicar en estos casos.
Como leemos en palladinopellonabogados.com la actividad penal es fundamental para regir adecuadamente un país, teniendo en cuenta que este es uno de los mejores bufetes de España, especializados en el derecho penal con muchos años de experiencia dentro de este sector y cuya tasa de éxito es muy alta.
¿Qué hace exactamente un abogado penalista?
Como ya se ha comentado anteriormente, los abogados penalistas se encargan de orientar a sus clientes en el momento que deciden iniciar una demanda y ofrecen su servicio de asesoramiento en cualquiera otra cuestión relacionada con el derecho penal. Se trata de profesionales especializados en diferentes tipos de delitos que atentan contra las personas o la vida, como es el caso de lesiones, homicidios, abortos o asesinatos. De igual modo, también son esenciales para los delitos cometidos contra el patrimonio, tales como estafas, robos o hurtos.
También es habitual contratar este tipo de servicios cuando se dan casos de delitos financieros y económicos, sobre todo, en situaciones de blanqueo de capitales o contra el fisco. Igualmente, son expertos en delitos contra la Seguridad y Salud Pública, la Administración, delitos sexuales, laborales o informáticos o incluso contra los ciudadanos en el exterior.
¿Qué funciones desempeña?
Son muchas las funciones que puede desempeñar un abogado penalista, entre otras, una de las principales es la de asesoramiento, ya que informa en todo momento al cliente de cómo va el caso y las gestiones que se están haciendo. Por supuesto, también acompaña al cliente durante todo el proceso, ya que debe orientarlo así como recopilar todas las pruebas en beneficio del mismo.
Asimismo, los abogados penalistas realizan un análisis cronológico y detallado de los hechos, tienen que llevar a cabo negociaciones, preparar alegatos de defensa y garantizar la invulnerabilidad de derechos al acusado.
Requisitos para ser abogado penalista
Al igual que ocurre en otras profesiones, en el caso de querer ser abogado penalista es imprescindible contar con la formación adecuada. En este sentido, debe contar con la titulación en Derecho y haber cursado un máster de acceso a la abogacía. También deben contar con un máster en derecho penal y estar colegiado en el Colegio de Abogados de la localidad donde desarrolle su actividad.
Además de todo esto, es esencial que este tipo de letrados tengan una buena capacidad de oratoria y de argumentación, ya que son dos aspectos muy importantes dentro de un juicio, así como ser una persona ágil, observadora, tener carácter negociador y estar totalmente actualizada con la legislación.
¿Por qué son importantes el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal?
Como se ha comentado al principio del artículo, todo abogado penalista que se precie debe tener en cuenta dos normas fundamentales para desarrollar su actividad, el Código Penal y la Ley de Enjuiciamiento Criminal.
Por su parte, el Código Penal es considerado una norma punitiva, puesto que es el encargado de establecer las penas y sanciones para todo los delitos que se cometan. Y en el caso de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, establece todas las acciones que se consideran delitos o faltas.