31 octubre 2019 | Publicado : 14:10 (31/10/2019) | Actualizado: 14:11 (31/10/2019)
El Tribunal Supremo no ha admitido el recurso interpuesto por la anterior interventora de la Diputación de Cáceres, lo cual da la razón a la institución provincial en cuanto al despido adoptado "con valentía" con el único fin de "poder trabajar de forma ágil, segura y con todas las garantías" que da la legalidad.
Así lo ha destacado portavoz del Equipo de Gobierno de la Diputación de Cáceres, Álvaro Sánchez Cotrina, en una comparecencia en la que ha informado de la decisión que viene a "dar la razón" a la institución provincial en cuanto al cese de la interventora, que elevó al Supremo la sentencia número 96 dictada por la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx).
La diputación señala que el cese de la interventora se produjo, a través de una resolución de la presidenta, Rosario Cordero, debido a la "pérdida de confianza en su idoneidad técnica".
La decisión del Supremo rechaza además las críticas de la oposición al despido, según Sánchez Cotrina, que ha recordado que se llegó a hablar de "caza de brujas", y viene a reflejar que lo único que se pretende es "poder trabajar de forma ágil, segura y con todas las garantías" que da la legalidad, para así "hacer la política que la ciudadanía necesita, que debe pasar por un desarrollo de la provincia y una gestión eficaz de las administraciones".
Ya el TSJ de Extremadura indicó, en su día, que "la Diputación no expone que se hayan cometido infracciones en el desarrollo del cargo por la interventora, sino que aprecia una serie de circunstancias en su actuación que conlleva la pérdida de la confianza profesional en la que se basó su nombramiento".
Además, señalaba que la resolución del cese pone de manifiesto "inseguridad, cambios de criterio y constantes observaciones" en la actuación de la Intervención que afecta a otros servicios administrativos, provocando "disfunciones en el funcionamiento de la Diputación".
