07 noviembre 2019
Y es que, al darnos cuenta de este error, es cuando comenzamos a cuidar dicho espacio como se merece, con dedicación y mimo, para que deje de ser una simple ducha y se convierta en un lugar más íntimo y relajante para nosotros.
La ducha termostática
Una opción perfecta para aquellos que busquen una ducha con instalación no empotrada que resulte elegante, moderna y sencilla, es la barra de ducha termostatica. Este tipo de duchas suelen estar realizadas con acero inoxidable cromado, y llevan incorporado normalmente un sistema antical, es decir, se adaptan perfectamente al uso contínuo de agua.
Este tipo de sistemas de ducha cuentan con la ventaja de poseer una válvula termostática que nos permite controlar perfectamente la temperatura del agua, y que nos protege de posibles quemaduras en caso de que, por ejemplo, surja un cambio en la misma por un aumento de la temperatura.
De hecho, las duchas termostáticas poseen muchas ventajas frente a los modelos más tradicionales, pues incluso nos ayudarán a ahorrar en nuestro consumo de agua realizado, o permitirán que no notemos ningún cambio en la presión o la temperatura de la ducha si alguien utiliza otro punto de agua en la casa.
Elegir la ubicación de la salida del agua es importante, sobre todo si el baño es pequeño, o si no es tan fácil abrir una pared debido a las cañerías o sistemas que se esconden tras ella. Éste es uno de los motivos por los que cada vez más clientes solicitan la instalación de una ducha en el techo de su zona de baño. Pero no es la única razón, pues la ducha empotrada techo posee múltiples ventajas y comodidades.
Este tipo de duchas se conocen también como “duchas de lluvia”, pues pueden poseer sistemas que hagan que el agua se difunda a baja presión y en forma de goteo vertical, imitando el efecto de una suave lluvia. Éste es uno de los motivos por los que es una opción muy adecuada si buscamos que nuestra ducha nos ofrezca diez minutos de paz y tanto descanso mental, como físico. Además, las duchas de techo también están hechas de los mejores materiales, para que el paso del tiempo y del agua no sean un problema para su uso y funcionamiento.
Cuando cambiamos de ducha, ponemos especial atención en lo que nos ofrece, pero cuando cambiamos todo lo que va con la ducha, buscamos los elementos que más de acuerdo vayan con la decoración del espacio de nuestro cuarto de baño.
Una tendencia actual es la griferia dorada, que ofrece un estilo elegante con un corte renacentista que le aportará elegancia, suavidad y clasicismo a nuestro cuarto de baño. Al tratarse de la grifería, no será un elemento grande que recargue el espacio, por lo que el color dorado no conseguirá en ningún momento ser apabullante o excesivo, sino que por el contrario, se convertirá en un pequeño detalle de clase.
Si, por el contrario, nuestro cuarto de baño ya posee colores llamativos, o simplemente, creemos que el dorado o los tonos claros no son la mejor solución, podemos mantenernos en un estilo más sobrio y sencillo, y aún así moderno, con una grifería oscura. La griferia negra es un elemento perfecto para aquellos baños luminosos y coloridos.
También puede ser útil para cuartos de baño que posean un espacio reducido, o si contamos con otros elementos oscuros, que combinen con este color de grifería. Además, las griferías negras pueden ser con brillo o en mate, dando muy distintos efectos en nuestro cuarto de aseo.
