19 mayo 2023
Sobre todo en temporada alta, Mallorca puede llegar a ser un destino costoso. Por esa razón, hay que seguir al pie de la letra muchas de las recomendaciones que otros viajeros hagan, ya que son los pequeños e invisibles gastos los que se deben cuidar a toda costa, para que la experiencia nunca deje de ser satisfactoria.
No obstante, también está el tema de disfrutar. Lo ideal es no privarse de las cosas que se quieran hacer, sino más bien encontrar formas alternativas de disfrutarlas y hacerlas.
Poco se habla de las necesidades de movilidad dentro de Mallorca. No todos los destinos codiciados de la isla se encuentran tan cerca, y si se quieren conocer las calas, las playas, los mercadillos, el casco histórico o visitar la Catedral, hay mucho trecho por recorrer. Posiblemente, el transporte público no sea una opción válida, y contratar servicios como taxis resulte poco práctico y bastante costoso.
Una opción pudiera ser el Alquiler de Motos, Bicicletas y Coches en Cala d'Or (Mallorca), servicios cada vez más accesibles dentro de la isla de Mallorca, y que permiten tener en cuenta distintos medios de transporte, ya que en algunos casos ni siquiera se precisará de un coche, sino que bastará con una moto, para medias y largas distancias, o hasta con una bicicleta en alquiler, para distancias y trayectos más cortos.
Mallorca es un destino que por lo general no admite improvisaciones. O, de plano, puede representar un sobrecoste importante para quienes no reservan con antelación.
En ese sentido, es conveniente saber de antemano que se quiere visitar Mallorca, y más aún, qué lugares o experiencias se quieren conocer o disfrutar. De esa manera, con un itinerario bastante claro y detallado, se podrá planificar de una mejor manera.
Y tras eso, lo que sigue es reservar lo referido al alojamiento, donde no necesariamente se tiene que apostar por hoteles, ya que hay una inmensa variedad e incluso a precios económicos; y también el tema de los boletos de avión, si es el medio de transporte utilizado para llegar a la isla.
Es una forma no solo de ahorrar dinero en todos los sentidos, sino también de descubrir una isla mucho más auténtica, más enfocada en el día a día y no únicamente preparada para el turismo. Permite hacer un turismo, si se quiere, más distendido.
Desde luego, mucho tendrá que ver los destinos y atractivos que se quieran disfrutar, ya que algunos no tendrán su mejor cara en ciertas épocas del año.
Si bien los gastos imprevistos jamás van a desaparecer, uno de los que se puede prácticamente eliminar de las preocupaciones durante el viaje es el referido con la pérdida de equipaje, el retraso de vuelos o algún padecimiento de salud.
Con la existencia hoy día de muchos seguros de viaje que se pueden contratar por día, por semana y hasta por mes, si bien se gastará algo más para cubrir la póliza, el potencial de ahorro puede llegar a ser enorme en caso de que se tuviera que acudir a sus coberturas.
La isla de Mallorca es uno de los destinos predilectos dentro de las Baleares. No el único, pero sí el punto de inicio por antonomasia. Visitar a la mayor de estas islas, así como al resto, es un proceso de planificación, de tener todo a punto y de estar abiertos a explorar formas alternativas de disfrutar del viaje. En el proceso, la cantidad de dinero, de tiempo y de disgustos que se pueden ahorrar hacen que todo valga la pena.
