08 noviembre 2024
La plataforma Salvemos la Montaña de Cáceres busca recuperar la calle con la manifestación de este domingo, 10 de noviembre, contra la mina de litio que se proyecta en la Sierra de la Mosca.
Así pues, con esta convocatoria, el colectivo culmina varias semanas de intensa actividad en las que ha ido reforzando los argumentos contrarios a este proyecto minero que impulsa la empresa Extremadura New Energies (ENE).
La manifestación partirá a las 12,00 horas desde la plaza de América y llegará hasta la Plaza Mayor, donde tendrá lugar la lectura de un manifiesto, en el que se destacará "el brutal impacto que tendría la mina, su megavertedero y su megaplanta de tratamiento químico sobre nuestro territorio, nuestros recursos, nuestra economía y nuestra salud", según la plataforma.
En estas últimas cinco semanas previas a la manifestación, Salvemos la Montaña ha actualizado las 'Nueve razones para decir no a la mina de litio de Cáceres'; ha desarrollado un ciclo de 9 charlas por los barrios de la ciudad; y ha colocado mesas informativas en la calle para transmitir a la población qué consecuencias tendría el proyecto minero para la ciudad y su calidad de vida.
Asimismo, ha generado la recreación en 3D de las instalaciones basándose en los datos de la propia empresa, y ha convocado una manifestación que espera supere las cifras de asistencia de las últimas actividades reivindicativas que ha convocado, como la cadena humana rodeando el Ayuntamiento, la iniciativa de llevar velas a las escaleras del edificio consistorial para "combatir el oscurantismo que rodea al proyecto y su tramitación", en las que se superó con creces el millar de asistentes.
Según este colectivo, "el impacto de las imágenes 3D publicadas este mismo lunes en la sociedad cacereña ha sido evidente", lo que ha hecho que se "multipliquen" las muestras de oposición a este proyecto "que conllevaría el expolio y la contaminación de la Sierra de la Mosca y El Calerizo, piezas clave de la existencia de la propia ciudad", asegura en nota de prensa la plataforma que recuerda que dichas imágenes se han confeccionado de acuerdo con los números y planos de la empresa.
Sin embargo, advierte que estos datos han sido "minimizados" y "falseados" por parte de la empresa promotora del proyecto minero "para reducir el impacto social que causaría conocer las dimensiones reales, así como para facilitar la obtención de una Declaración de Impacto Ambiental positiva".
La clave está en que la promotora aspira a volver a meter dentro de la mina (backfilling) el 80% de los residuos -contaminados- resultantes del tratamiento químico de la roca triturada, cuando las referencias mundiales de consultoras mineras marcan el límite del backfilling en el 50%, y la realidad de la mina de Aguas Teñidas, en Huelva, que es la que pone de ejemplo de mina subterránea Infinity Lithium, es que este porcentaje solo llega al 40%.
"Por tanto, que digan que en Cáceres enterrarían el 80% es algo completamente inviable e irreal", ha recalcado la plataforma, al tiempo que añade que solo pasando de dejar el 20% de residuos en superficie, como dicen ahora, al 40% (batiendo aun así el "récord mundial") el tamaño del megavertedero se multiplicaría por 2; y si solo pudieran enterrar un 40%, los vertidos y el tamaño del vertedero se triplicarían.
Salvemos la Montaña también hace referencia a "un estudio hecho por encargo a la medida de la empresa" que también se ha hecho público esta semana y que, a su juicio, "deja en evidencia la poca solvencia del proyecto".
"Tal ha sido la repercusión de las imágenes en 3D, que la empresa ha forzado la publicación de un documento que ha redactado por 36.600 euros un equipo vinculado a la Universidad de Extremadura, y que da por válidos todas las cuentas y planes de la empresa y alaba una supuesta su capacidad tractora en términos económicos vinculándolos a otros proyectos que ya están en marcha en la ciudad y que nada tienen que ver con la mina de litio", asegura la plataforma.
A este respecto, critica que ese documento no analiza el lastre que supondría para la economía de la ciudad tener un megavertedero de residuos tóxicos (arsénico y sulfuros entre otros) de dimensiones inimaginables a 600 metros de la ciudad, visible incluso desde la Ciudad Monumental, o el empeoramiento de la calidad del aire, la contaminación del agua o la pérdida de los valores naturales asociados a la Sierra de la Mosca.
Salvemos la Montaña asegura que al estudio no tiene los datos actualizados porque, en el supuesto análisis del impacto económico que tendría el proyecto de la mina en la ciudad "tampoco consideran relevante hablar de que el precio del litio se ha desplomado en los dos últimos años de manera estrepitosa".
"Interesadamente, sus análisis del mercado del litio (y también de otros datos socioeconómicos) terminan a finales de 2022, cuando los precios eran cuatro veces superiores a los actuales", apunta la plataforma que añade que el estudio "tampoco habla de los reajustes en plantilla, estructura y económicos que han tenido lugar en el seno de la promotora minera en los últimos meses".
Así pues, llama la atención, según asegura el colectivo, que "si no iban a incluir nada desde finales de 2022, a pesar de su relevancia, hayan decidido sacarlo a la luz justo unos días antes de la manifestación convocada por Salvemos La Montaña".
Según el colectivo ciudadano, "esta anécdota final demuestra la desesperación de la minera por vestirse de una solvencia que no tiene a golpe de talonario, gracias en parte al dinero público ya captado y que decían que no iban a necesitar".
Por todo ello, la plataforma Salvemos La Montaña mantiene "firme" su oposición al proyecto después de 7 años y por ello ha intensificado las acciones de comunicación y presencia en la calle, a la que sucederán las acciones legales que "son imprescindibles, puesto que la historia de la tramitación de esta iniciativa especuladora está plagada de irregularidades y de una permanente sensación de desamparo ante las Administraciones Públicas, que solo han sido corregidas de forma efectiva hasta el momento en los tribunales", concluye.
